Análisis de las diferentes ventajas de la electrificación de la flota

La cifra de modelos de vehículos eléctricos que se lanzan al mercado crece continuamente y ahora es el mejor momento para comenzar el proceso de electrificación de la flota. Aunque se suele hacer énfasis principalmente en los beneficios medioambientales de la transición a vehículos eléctricos, hay muchas otras consideraciones que hay que tener en cuenta. Analicemos todas las ventajas que hacen el cambio a vehículos eléctricos más deseable para los gestores de flotas.

Los vehículos eléctricos pueden contribuir a la seguridad de tus empleados y activos

Independientemente del tamaño de tu empresa, la seguridad siempre debe ser una prioridad. Al comparar los vehículos eléctricos con los vehículos convencionales con motor de combustión interna, los eléctricos se consideran generalmente más seguros. Esto se debe a que, además de cumplir los requisitos establecidos en materia de normas y pruebas de seguridad, los vehículos eléctricos se someten a certificaciones de seguridad adicionales.

Un ejemplo de una prueba adicional específica para vehículos eléctricos consiste en verificar la protección de la batería para evitar problemas en caso de colisión. Esto nos lleva a la siguiente ventaja en lo relativo a seguridad: el peso y la disposición de la batería en el vehículo.

Las baterías de los vehículos eléctricos se distribuyen a lo largo de la parte inferior del vehículo, proporcionando un centro de gravedad más bajo. Esto hace que durante una colisión disminuya la probabilidad de vuelco del vehículo y por consiguiente, y de acuerdo con las estadísticas, la letalidad (en inglés) de la colisión.

Por último, los vehículos eléctricos de batería son estructuralmente más seguros que los vehículos de combustión interna, gracias a la ausencia de motor de explosión y componentes asociados. Esto permite disponer de espacio libre adicional que actúa como una zona de deformación que protege a los ocupantes al absorber la mayor parte de la energía en caso de colisión.

Los fabricantes de vehículos eléctricos están mejorando continuamente las medidas de seguridad a bordo. También están empezando a incluirlas como características de serie, lo que hace que se encuentren entre los vehículos más seguros en circulación.

La electrificación de la flota puede contribuir a mejorar tus resultados

Si bien el coste inicial de un vehículo eléctrico puede ser superior al de uno de comparable, existen otros beneficios que proporcionan un ahorro significativo durante toda la vida útil.

Dado que los vehículos eléctricos tienen menos piezas móviles, sus costes de mantenimiento son también menores. Los vehículos completamente eléctricos no requieren, por ejemplo, ningún tipo de cambio de aceite. No hay correas de distribución ni bujías que sustituir. La ausencia de motor de combustión interna significa no tener que preocuparse más de problemas como los cilindros agarrotados o el rateo. Por último, los vehículos eléctricos utilizan un sistema de frenado regenerativo que reduce también el desgaste de las pastillas de freno.

El ahorro en los costes de combustible es otra ventaja considerable de conducir un vehículo eléctrico. Forbes (en inglés) ha determinado que cuesta menos de la mitad viajar en un vehículo eléctrico en comparación con un vehículo de gasolina. Esto se debe a que la conversión de energía es de tres a cuatro veces más eficiente en los vehículos eléctricos. Otro factor es que el coste promedio de la electricidad es menor que el de otros combustibles. Las tarifas de electricidad también están más reguladas, por lo que varían menos a lo largo del año, a diferencia de los precios del gas.

La combinación de un mantenimiento reducido y una fuente de combustible constantemente más barata hacen que los vehículos eléctricos sean menos costosos durante toda su vida útil. También contribuye a unos costes operativos más predecibles.

Los vehículos eléctricos pueden mejorar la calidad de vida

Hay una razón por la que los vehículos eléctricos están asumiendo un papel esencial en las iniciativas para combatir el cambio climático. La EPA afirma que el sector del transporte (en inglés) es el que más contribuye a las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que representa el 28% de todas las emisiones. La transición a vehículos eléctricos será esencial para reducir nuestra huella de carbono y alcanzar los objetivos climáticos de iniciativas como el Acuerdo de París.

Los vehículos de emisión cero, y más específicamente, los vehículos eléctricos de batería, tendrán el papel más importante. Su diseño elimina las emisiones de escape y pueden reducir las emisiones globales entre un 30 y un 90% dependiendo de la fuente de electricidad.

Los vehículos eléctricos también son considerablemente más silenciosos que los vehículos de combustión interna. Contribuyen a reducir significativamente un aspecto como la contaminación acústica, que, de acuerdo con diferentes estudios (en inglés), puede tener varias implicaciones para la salud. La reducción del estrés y la prevención de la pérdida auditiva son solo dos de los beneficios que se han atribuido al cambio a un vehículo eléctrico.

A pesar de ello, esta falta de ruido del motor puede considerarse un inconveniente en algunas ocasiones, ya que puede acarrear posibles accidentes, especialmente con peatones o ciclistas. Por ello, la Unión Europa ha puesto en marcha una normativa que entrará en vigor el 1 de julio de este año y que exige que los nuevos vehículos eléctricos estén equipados con un sistema de aviso acústico cuando se desplacen a menos de 20km/hora.

¿Cómo puedes beneficiarte de la incorporación de vehículos eléctricos a tu flota?

El mercado de los vehículos eléctricos ha avanzado rápidamente en los últimos dos años. Dicho esto, BloombergNEF ha predicho que los vehículos eléctricos deberían alcanzar la paridad de precios en 2023, ya que los costes de las baterías continúan descendiendo. Estos hechos, junto con todas las demás ventajas adicionales (Plan Moves III, reducción del IVA, etc), ponen de manifiesto que los gestores de flotas deberían estudiar seriamente la posibilidad de electrificar sus flotas.

La incorporación de vehículos eléctricos a tu flota puede parecer una tarea titánica. Aunque hay muchos aspectos a tener en cuenta, al verlo desde una perspectiva general resulta evidente que los beneficios son superiores a los costes.

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